ITALIA: El centroizquierda sale reforzado de las locales tras arrebatar a la derecha alcaldías de feudos como Verona

El centroizquierda sale como vencedor de las elecciones locales de este año. Aunque en la primera vuelta, la derecha mantuvo ciudades importantes como Génova o L’Aquila y se hizo con Palermo, la segunda vuelta ha acabado por dar un mayor número de victorias al centroizquierda, que en parte de los municipios iba aliado también con el M5S. Así, el centroizquierda se hace con alcaldías en manos de la derecha como Verona, Alessandria o Catanzaro. Además, el centroizquierda recupera Parma tras 24 años en manos de la derecha o de listas cívicas.

De las 142 ciudades que votaban (superiores a 15.000 habitantes), el centroizquierda gana en 52, la derecha en 40, las listas cívicas en 31, el M5S en 3 y otro tipo de listas en 16. En las 26 capitales que iban al voto, el centroizquierda partía con 4 alcaldías (2 del PD) y ha salido de las elecciones con 10 (5 del PD).

En Verona, feudo de la derecha de una región conservadora como Véneto, el centroizquierda sorprendió con una victoria frente a la derecha. El exfutbolista Damiano Tommasi ganó con un 53,4 % del voto frente al 46,6 % del actual alcalde de Fratelli d’Italia. El único paréntesis con un alcalde centroizquierdista con anterioridad había sido el período 2002-2007.

En Parma, el centroizquierda volverá al gobierno tras 24 años. Aunque en los últimos 5 ha gobernado un alcalde del ecologista y progresista Italia en Común, este se presentó por una lista cívica alternativa al centroizquierda. Previamente, el mismo alcalde había sido candidato por M5S. Esta vez ha sido una coalición del centroizquierda, con el PD a la cabeza, la que ha ganado. El independiente Michele Guerra venció con un 66,2 % del voto ante un candidato de la derecha, en cuya coalición no estaba FdI, pero sí Forza Italia y Lega.

En Catanzaro, capital de Calabria, gobernada desde 2011 por la derecha, el centroizquierda ganó con un 58,2 % del voto. La derecha bajó respecto a la primera vuelta, pasando del 44 % al 41,8 %.
En Alessandria, el centroizquierda recuperó la alcaldía, después de 5 años de Gianfranco Cuttica di Revigliasco, de la Lega. El independiente del CSX Giorgio Abonante ganó con un 54,4 %.
En Piacenza, históricamente una ciudad más de izquierdas (está en Emilia-Romagna), el Partido Democrático volverá a tener la alcaldía, tras 5 años de gobierno de una independiente de la derecha. El centroizquierda se hizo con la alcaldía con un 53,5 % del voto.
En Monza, el centroizquierda recupera la alcaldía por sorpresa. Después de 47 % que obtuvo en primera vuelta el alcalde de la derecha, Dario Allevi (FI), parecía claro favorito a la reelección. Sin embargo, el candidato del PD finalmente ganó con un 51,2 %.
En Cuneo, el centroizquierda mantiene la alcaldía con una amplia victoria. La candidata del PD, que reemplazará a un independiente del CSX, ganó con el 63,3 % del voto.

Sin embargo, no son todo victorias del centroizquierda. En Como, un candidato de una lista cívica derrotó con un 55,4 % del voto en la segunda vuelta a la candidata del centroizquierda, que en primera vuelta se había impuesto. Durante los últimos años, la ciudad había tenido un alcalde de la derecha.
En Viterbo, la derecha también pierde la alcaldía en favor de una candidata de una lista cívica, la cual venció en la segunda vuelta con un 64,9 % del voto a la candidata del centroizquierda.

La derecha, por su parte, mantuvo en Gorizia, donde el alcalde de Forza Italia fue reelegido con un 52,2 % del voto frente a la candidata del centroizquierda.
En Barletta, el candidato de la derecha, elegido como alcalde en 2018, ganó ampliamente con un 65 % del voto frente a la candidata del centroizquierda.
En Frosinone no hubo sorpresas y la derecha mantuvo la alcaldía. Después de la victoria con un 49,3 % en la primera vuelta, parecía difícil que se le diese la vuelta al resultado. El candidato de la derecha venció finalmente con un 55,3 % del voto.

Pero la derecha también consiguió ayer arrebatar una alcaldía al centroizquierda. En Lucca, el candidato de la derecha revirtió los resultados de la primera vuelta, y se impuso con un 51 % del voto frente al candidato del centroizquierda, coalición que llevaba gobernando desde 2012.