La destitución de Malcolm Turbull como líder de la liberal conservadora Coalición Liberal Nacional y primer ministro de Australia, y la elección de Scott Morrison, del ala más derechista de la coalición, ya está teniendo sus efectos en las encuestas electorales. Turbull, que fue destituido tras perder una votación interna de la coalición, en la que Morrison ganó por tan solo 4 votos de diferencia, representaba el ala más moderada. Durante su gobierno, ha apoyado el matrimonio homosexual y ha apostado por la lucha contra el cambio climático, motivos que le han enfrentado con el núcleo más derechista del partido. La pasada semana, la facción más conservadora de la Coalición Liberal Nacional se impuso y eligió a Scott Morrison como nuevo primer ministro.
De acuerdo con la última media de encuestas, en esta semana, los conservadores habrían bajado unos 4 puntos mientras que los laboristas habrían crecido unos 2 puntos. El Partido Laborista sube hasta el 37,8 % y se sitúa como primera fuerza. Además, en el voto de segunda preferencia, obtendría un 55 % de los votos frente al 45 % de la coalición centroderechista. La Coalición Liberal Nacional pierde 4 puntos de intención de voto y se sitúa con un 34,4 %. Como tercera fuerza se mantiene el izquierdista Partido Verde, que sube ligeramente hasta el 11,5 %. Por último, el ultraderechista Una Nación se sitúa con un 6,1 %.
