Se mantiene el desgaste del gobierno noruego de laboristas y Centro. Meses después de llegar al gobierno, los partidos del gobierno sufrieron una importante caída en intención de voto, consecuencia de un inesperado giro en la política de contención del Covid (con mayores restricciones) y las consecuencias de la crisis energética, entre otros motivos. Los conservadores, que perdieron el poder hace medio año, se mantienen desde hace unos meses como primera fuerza política en intención de voto. La derecha suma ya el 47 % de la intención de voto, lo que les acercaría a la mayoría en caso de elecciones.
De acuerdo con la última media de encuestas electorales, los conservadores se sitúan con un 26,5 % de intención de voto, mejorando en 6 puntos el resultado de las elecciones de septiembre. Los laboristas se mantienen segundos con un 22,5 %, 4 puntos por debajo de las elecciones de septiembre. El derechista Partido del Progreso sube hasta el 12,5 %, consolidando su tercera posición. El Partido del Centro frena su caída y se mantiene con un 8,5 %. Izquierda Socialista baja hasta un 8 %, el Partido Rojo cae hasta el 8 %, el Liberal se mantiene con un 4,5 %, el Verde se sitúa con un 3,5 %, y el Democristiano se mantiene con un 3,5 %.
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