Los conservadores llegan a la recta final de la legislatura como claros favoritos de cara a las elecciones generales del próximo año. Si bien las distancias se han acortado en el último año, los conservadores se mantienen como primera fuerza política de Noruega, por encima de los laboristas, que han sido el partido más votado en todas las elecciones generales desde 1927. El gobierno de laboristas y Centro ha sido impopular desde el inicio, cuando tuvo que afrontar una profunda crisis energética y la inflación como consecuencia de la guerra en Ucrania.
De acuerdo con la última media de encuestas, el Partido Conservador se sitúa con un 25 % de intención de voto, unos 5 puntos por encima del resultado de las elecciones de 2021. Los laboristas recuperan algo de espacio (el año pasado llegaron a registrar un 17 %) y se sitúan con un 21 %, aún 5 puntos menos que en 2021. La derecha radical del Partido del Progreso se consolida en tercera posición con un 16,5 %, por encima del Partido del Centro, actual socio de los laboristas y que quedó tercero en los últimos comicios. Centro, que registra un 6 %, es también superado por Izquierda Socialista, que se coloca con un 9,5 %. La izquierda radical del Partido Rojo se sitúa con un 5,5 %, en empate técnico con el Partido Liberal. Por debajo de la barrera del 4 % (que da acceso a escaños de compensación para una representación proporcional) se mantienen verdes y democristianos, con un 3,5 % cada uno. Por último, Industria y Empresa se sitúa con un 2 %.
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