Los conservadores canadienses se mantienen como clara primera fuerza política cuando queda apenas un año para el final de la actual legislatura. La oposición liderada por Pierre Poilievre sigue dando sus frutos, aprovechando la gran impopularidad del primer ministro Justin Trudeau, claramente desgastado tras 9 años de gobierno. La inflación, la crisis de vivienda o la inmigración son asuntos que claramente han impactado negativamente en la opinión hacia el gobierno liberal, que se mantiene actualmente en minoría después de que recientemente el izquierdista NDP les retirara el apoyo parlamentario, en clara preparación para las próximas elecciones federales.
De acuerdo con la última encuesta electoral de Nanos Research, por primera vez desde 2015, los liberales estarían empatados con el NDP. Así, los liberales no solo han perdido la primera posición, sino que tampoco tendrían asegurada ahora la segunda. El NDP podría, de esta manera, liderar la próxima oposición a un gobierno conservador, una situación relevante de cara a la configuración de la próxima legislatura. Según esta encuesta, los conservadores crecen más de 2 puntos en un mes, situándose con un 41,5 %. Los liberales bajan más de 4 puntos hasta el 21,5 %, porcentaje al que sube el NDP, que mejora en más de 3 puntos el último resultado electoral. El Bloque de Quebec se mantiene estable con un 7 %, los Verdes se benefician del descontento con los liberales y suben hasta el 5,5 % y la derecha radical del Partido Popular se queda con un 2 %, opacado por la fortaleza de los conservadores. Los votantes de la derecha priorizan así asegurar el cambio de gobierno antes que un voto de carácter más ideológico.
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