La impopularidad del primer ministro Justin Trudeau tras casi una década en el gobierno está arrastrando a los liberales a uno de los momentos de mayor debilidad de su historia a nivel electoral. El Partido Liberal perdería unas cinco sextas partes de su representación parlamentaria, según las encuestas electorales actuales. El agotamiento del liderazgo de Trudeau, la inestabilidad de su gobierno y las diferencias internas en el partido y temas como la inmigración y la vivienda han dañado enormemente a los liberales. El Partido Conservador recogería este sentir mayoritario en favor del cambio y arrasaría con uno de sus mejores resultados históricos. El progresista NDP, que durante esta legislatura fue apoyo parlamentario de los liberales, no se vería beneficiado por el hundimiento de Trudeau, y el Bloque de Quebec sería quien lideraría la oposición al nuevo gobierno conservador, según la proyección de escaños.
De acuerdo con la última media de encuestas electorales, el Partido Conservador se sitúa con un 45 % de intención de voto, con lo que podría doblar su representación, superando los 240 escaños, más de dos tercios del total. El Partido Liberal se deja otros 6 puntos este año y registra un 19,5 % de intención de voto, con lo que bajaría hasta lo 25 escaños, mismos que obtendría el NDP, que se mantiene con un 18,5 %. El Bloque de Quebec sube ligeramente hasta el 8,5 % y podría crecer hasta el entorno de los 46 escaños. Los Verdes se sitúan con un 4 % y podrían mantener su representación de 2 escaños, mientras que la derecha radical del Partido Popular se mantiene con un 3 %, que podría ser insuficiente para que ganaran escaños.
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