Luna de miel para los laboristas australianos. Tras ganar cómodamente las elecciones federales del pasado 3 de mayo, con el segundo mejor resultado electoral en escaños de su historia y asegurándose un segundo mandato consecutivo, la formación liderada por el primer ministro Anthony Albanese vuelve a crecer en las encuestas electorales. Los laboristas amplían a 7 puntos su ventaja en el voto primario y ganarían por 15 puntos el voto preferencial.
De acuerdo con la última media de encuestas electorales, los laboristas australianos escalan hasta el 36 % de intención de voto, un porcentaje que aumenta hasta el 57,5 % en el caso del voto preferencial. Por su parte, la Coalición Liberal-Nacional, cuyos principales integrantes (Partido Liberal y Partido Nacional) rompieron durante una semana tras las elecciones, ante desacuerdos mostrados por el agrarista Nacional con su contraparte liberal, continúa su descenso. La Coalición registra en junio un 29 % de intención de voto, uno de los peores datos de su historia, y se quedaría con un 42,5 % en el voto preferencial.
En tercera posición se mantienen Los Verdes, que registran un 13 % de intención de voto. La derecha radical de Una Nación sube un par de puntos hasta el 8,5 %, mientras que Trompeta de Patriotas desaparece de los registros de las encuestas electorales.
Este fin de semana, mientras, el estado de Tasmania celebrará sus elecciones estatales, en las que el liberal Jeremy Rockliff aspira a mantenerse como premier. Los liberales llevan desde 2014 en el gobierno y aparecen nuevamente como favoritos en estas elecciones, pese al buen desempeño laborista en el estado en las elecciones federales.
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