El conservador Partido Nacional gana ampliamente las elecciones generales de Nueva Zelanda, pero el recuento del voto especial y exterior le arrebata 2 escaños clave. Antes del recuento de estos votos, Nacional y el libertario ACT sumaban justo la mayoría absoluta. Sin embargo, los resultados definitivos han situado a ambos partidos con 59 de los 122 escaños, 3 por debajo de la mayoría.
Este cambio en los resultados complejizará la legislatura, ya que el gobierno deberá contar con la presencia o apoyo del populista Nueva Zelanda Primero (NZ First). Este partido, de ideología nacionalista, conservador en lo social y más intervencionista en lo económico, gobernó en 2017 con los laboristas. Sin embargo, la desconfianza entre estos dos antiguos socios de gobierno ha llevado a ambos a descartar cualquier pacto, por lo que NZ First entrará con toda seguridad a formar parte del nuevo ejecutivo de derechas.
El Partido Nacional sube hasta el 38,1 % (+12,5 respecto a 2020) y se hace con 48 escaños, superando ampliamente a los laboristas, que se desploman hasta el 26,9 % (-23,1) y se quedan con 34 escaños. Los Verdes suben hasta el 11,6 % (+3,7) y se consolidan en tercera posición con 15 escaños. El libertario ACT sube ligeramente hasta el 8,6 % (+1) y se sitúa con 11 escaños. Nueva Zelanda Primero sube hasta el 6,1 % (+3,5) y vuelve a conseguir representación, con 8 escaños. El Partido Mãori sube hasta el 3,1 % (+1,9) y consigue triplicar su representación, logrando 6 escaños. El centrista TOP sube hasta el 2,2 % (+0,7), pero no consigue escaños.
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