Comienza la recta final hacia las próximas elecciones presidenciales y legislativas de Uruguay. El opositor izquierdista Frente Amplio mejora sus datos respecto a las últimas elecciones y aumentaría sus opciones de volver al poder ante un gobierno que acusa algo de desgaste. Sin embargo, todas las opciones se mantienen abiertas. El Partido Nacional de Lacalle Pou se mantiene fuerte y apenas retrocede respecto a los comicios de 2019, concentrando las pérdidas gubernamentales sus aliados del Partido Colorado y Cabildo Abierto. Antes de las elecciones, previstas para noviembre, tendrán que celebrarse en junio las elecciones internas, que servirán para medir los apoyos de los partidos y elegir a sus candidatos.
De acuerdo con la última media de encuestas electorales, el Frente Amplio crece hasta el 43 %, acumulando una ganancia de unos 4 puntos respecto a 2019. El conservador Partido Nacional retrocede en el último mes y se coloca con un 27 %. El liberal Partido Colorado se sitúa tercero con un 6 %, por encima del ultraderechista Cabildo Abierto, que desciende hasta el 3,5 %. El Partido Independiente se sitúa con un 1,5 %, el ecologista PERI ronda el 1 % y el derechista Partido de la Gente se queda con apenas un 0,5 %. Hay que señalar que en torno al 12 % de los entrevistados en las encuestas se sitúa indecisa o proclive al voto en blanco o la abstención, siendo estos incluidos en el total de los datos mostrados en los sondeos. Además, también resulta relevante que los indecisos son más próximos al Partido Nacional y los partidos oficialistas que al Frente Amplio, por lo que cuentan con un mayor margen de mejora de cara a los próximos meses.
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