Los conservadores y los laboristas noruegos vuelven a situarse en empate técnico, tras varios meses de dominio del centroderecha en las encuestas. Las últimas encuestas indican una vuelta a una situación más similar a la de las últimas elecciones. En las pasadas elecciones de septiembre de 2017, los laboristas obtuvieron uno de sus peores resultados históricos, aunque consiguieron mantenerse como primera fuerza y el bloque del centroderecha mantuvo su mayoría y el gobierno.
Tras estos resultados, los laboristas se hundieron más aún y el Partido Conservador de la primer ministra Erna Solberg subieron hasta ponerse ligeramente por encima y, desde enero de 2018, se colocaron con una ya significativa ventaja sobre el resto de partidos. Sin embargo, en el último mes, los laboristas han conseguido recuperar espacio mientras que el bloque de la derecha ha ido perdiendo apoyos. De acuerdo con la última media de encuestas, el bloque de la izquierda (Partido Laborista, Izquierda Socialista y Partido del Centro) se encuentra en su mejor momento de la legislatura, aunque aún casi 3 puntos por debajo de los partidos de la derecha.
Según la media de encuestas, los laboristas suben unos dos puntos hasta el 26,1 %. Empatan así con los conservadores, que se sitúan con un 25,9 %. Como tercera fuerza se mantiene el ultranacionalista Partido del Progreso, que se mantiene con un 12,8 %. El Partido del Centro se sitúa con un 11,7 %. Izquierda Socialista se sitúa con un 6,7 %; el Partido Rojo detiene su crecimiento y se sitúa con un 4,4 %; el Democristiano se sitúa con un 4,3 %; el Liberal, con un 4,2 %; y el Verde, con un 2,9 %.