COSTA RICA: Liberación Nacional se mantiene como primera fuerza a nivel local, pero pierde un tercio de sus alcaldías, incluida la capital

El Partido de la Liberación Nacional (PLN) pierde su hegemonía a nivel local y reduce en un tercio su número de alcaldías, tras las elecciones municipales de este domingo. El PLN, originariamente de centroizquierda y actualmente un partido centrista con corrientes internas, continúa su decadencia a nivel electoral y pasa de 43 a 29 alcaldías, su segundo peor dato desde los primeros comicios de este tipo, en 2002. Pese a ello, el PLN continúa siendo el partido con más alcaldías en el país, superando en 9 alcaldías al conservador Partido de la Unidad Social Cristiana (PUSC).

Especialmente sorprendente fue la derrota del PNL en la capital, el cantón central de San José. Allí, con un 24 % del voto y 4 puntos de ventaja, el candidato de la agrupación local Juntos San José, Diego Miranda, que empezó como concejal de la ciudad por el izquierdista Frente Amplio en 2016. Miranda, de 34 años, venció así, por sorpresa, sobre el alcalde Johnny Araya (PLN), en el poder entre 1998 y 2013 y desde 2016 a la actualidad.

Por su parte, el PUSC mantuvo su tendencia al alza y ganó 5 nuevas alcaldías, situándose con 20, su segundo mejor dato desde las primeras elecciones de 2002, cuando arrasó con 48. Los partidos de ámbito cantonal, como el del nuevo alcalde capitalino, frenan su auge y pasan de 13 a 11 alcaldías. La derecha libertaria de Unidos Podemos, escisión del Movimiento Libertario, consigue un gran crecimiento y se hace con 9 alcaldías, colocándose como el tercer partido nacional en el ámbito local. Otros partidos, como el Partido Liberal Progresista, la ultraconservadora Nueva República, el centroderechista Partido del Progreso Social Democrático (formación del presidente Rodrigo Chaves), el izquierdista Frente Amplio o el centroizquierdista Justicia Social Costarricense consiguieron alcaldías tras estas elecciones. Los conservadores PRSC y PNG mantuvieron las alcaldías que ya ganaron en 2020 y el centroizquierdista PAC del expresidente Carlos Alvarado pierde todo su poder local, confirmando su práctica desaparición.